L’ALTERNATIVA 26: REENCUENTRO CON EL CINE.

El pasado domingo 17 de noviembre finalizaron las proyecciones y actividades de la edición número 26 de l’Alternativa, después de la celebración el pasado año de su edición número 25. L’Alternativa es un certamen plenamente consolidado en el panorama cinematográfico de la ciudad que, sigue manteniéndose fiel a un estilo marcado por un cine diferente, alejado de la bienintencionada industria, y nacido en los márgenes, en la resistencia y la disidencia. Un cine alejado de un entramado cinematográfico, casi un coto cerrado, demasiado obsesionado en embellecerse y dar la espalda a la reflexión y el conocimiento del mundo en el que vivimos, alejándose de las realidades del ser humano y su tiempo. L’Alternativa propone cine resistente, cine furioso, cine complejo, cine guerrillero, cine abierto a todas las miradas inquietas y curiosas, lleno de energía. Un cine venido de diferentes lugares del mundo, heterogéneo en su esencia, rabiosamente contemporáneo y atemporal, cercano en su materia y su naturaleza Un cine que nos mira y propone nuevos caminos vistos desde infinidad de miradas diferentes, cine próximo e íntimo, un cine que nos acerca y nos transporta a universos imperceptibles e invisibles, mundos que buscan miradas críticas que los miren con atención y reposo. Unos trabajos muy necesarios que nos muestran realidades complejas, oscuras y tremendamente vivas, orgánicas y sinceras. Cine con espíritu dialoguista que huye de convencionalismos y sentimentalismos, construido en base a una identidad muy personal que lo hace muy reivindicativo, profundo y bello. Este año el  certamen cumple 26 ediciones, casi nada, 26 citas a favor de otro cine, de aquel que apenas tiene visibilidad, aquel que triunfa en festivales internacionales, el que grita sin que se lo oiga, en que un festival tan necesario como este le ofrece ventanas para mostrarse y compartir. Un cine que sorprende y deja huella, 26 citas que iluminan el otoño de la ciudad, que alumbran con cine los primeros fríos y lluvias.

El lunes 11, a media tarde, como suele ser habitual, arrancó la nueva edición con la película de inauguración, que en este caso se desmarcaron con una película para ofrecernos algo diferente, la propuesta ANDREI RUBLEV, una paniconografia (versión radiofónica), de Societat Doctor Alonso. La performance no dejó a nadie indiferente, todo el mundo se levantó diferente y especial, porque la propuesta era aguerrida y sorprendente, en el que a partir de la película de Tarkovski, en la que retrataba el viaje del pintor de iconos de la Rusia medieval para colorear los frescos de la catedral del Kremlin, de la que veremos imágenes fragmentadas y proyectadas en distintos lugares como tablets, pantallas y paredes, con su sonido en versión original, y mediante un sonido envolvente y fascinante, acompañado de una escenografía particular e íntima, nos hacen un recorrido sobre el arte, a través de sus diferentes realidades y formatos, donde la realidad muta, se muestra diferente y compleja. El martes 12 arrancaban las programaciones de películas de las diferentes secciones, así como sus talleres, seminarios y las actividades de profesionales. Mi segunda cita fue con LAS LETRAS DE JORDI, de Maider Fernández Iriarte. La directora una vieja conocida del festival por sus primeros cortometrajes, vuelve con su primer largo en la que aborda la palabra como medio de comunicación y sobre todo, la comunicación y el diálogo como herramienta fundamental para entenderse y compartir, a través de Jordi, que tiene parálisis cerebral, y las conversaciones que mantiene con la directora a través de un abecedario escrito en una cuartilla. Seguimos esta crónica diaria en la que descubrimos un ser humano con una gran comunicación y sentido del humor, en la vicisitud de dejar la vivienda con sus padres e ingresar en una residencia. La directora donostiarra crea un espacio sensible e íntimo donde captura la verdad y la humanidad de alguien discapacitado que da lecciones de vida y muestra su inmensa capacidad emocional, en una película bellísima, necesaria y sincera.

ERDE, de Nikolaus Geyrhalter. El director austriaco filma una película bestial y necesaria para contarnos de forma pausada e incisiva las acciones del ser humano en remover las tierras y construir túneles y subterráneos en una codicia sin fondo en dominar la tierra para conseguir crecer y crecer y capturar los minerales preciados como el cobre. Geyrhalter lo hace de una forma innovadora, porque mezcla los trabajos mediante máquinas y tecnología de última generación con los diferentes testimonios de los trabajadores que en muchos casos son conscientes del daño al planeta con su trabajo y en otros, los pocos, se consideran unos privilegiados y disfrutan de su trabajo. La película nos muestra diferentes países y lugares, interviniendo lo mínimo y capturando todo ese sin sentido en que se ha convertido el trabajo y nos habla con sinceridad de las terribles consecuencias para el medio ambiente. CAMPO, de Tiago Hespanha. Trabajo surgido del Máster de Documental de creación de la UPF, el director portugués nos sitúa en las afueras de Lisboa en el campo de tiro más grande de Europa, en el que a partir de una forma y narrativa reposado y contemplativa, nos va mostrando las diferentes realidades que en ese espacio magnético y bello conviven, como las maniobras militares con sus quehaceres cotidianos, aficionados a la astronomía que reflexionan sobre el espacio y sus estrellas, y demás moradores de un lugar que en ocasiones parece fuera de este planeta, como suspendido en el cielo, donde las cosas más mundanas y complejas se dan la mano de forma natural, donde el día y la noche parecen obedecer a un tiempo sin tiempo, a un lugar con memoria, que alberga todas las contradicciones humanas.

ZUMIRIKI, de Oskar Alegria. El director navarro ya estuvo en L’Alternativa con su primer largo La casa de Emak Bakia (2012). Ahora vuelve a deleitarnos con un trabajo inmenso y especial, lleno de sabiduría y esplendor cinematográficos, con un dispositivo sencillo y muy profundo, en que Alegria se marcha cuatro meses del verano de 2018 a reencontrarse con su memoria, al lugar donde siendo niño pasaba los veranos con su familia, frente al río y la pequeña isla, ahora sumergida por la construcción de una presa, pero todavía visibles las ramas de los árboles que se erigían en la isla. Como si fuese un Robinson Crusoe diferente, más cercano a Viernes, el director pamplonés nos seduce con sensibilidad y magnetismo en una película sobre el tiempo, la naturaleza, los animales, el conocimiento, la búsqueda personal y los recuerdos que están presentes aunque sean a través de unas pocas ramas. De la sesión de Cortos que vi el viernes 15, me detengo en PADRE NO NUESTRO, de María Cañas. La archivera de Sevilla vuelve al festival que en 2014 se le dedicó una retrospectiva dando buena cuenta de la presencia de los robots en nuestras vidas en consonancia con la transformación de las relaciones afectivas en tiempos de apps y demás. Como es habitual en su cine, Cañas muestra un sentido del humor desbordante en un mosaico infinito de imágenes que dialogan, disputan y reflexionan entre ellas, de toda índole capturadas de Youtube, esa nueva caja de pandora donde se publican los interminables deseos, frustraciones y desesperanzas de una sociedad vacía, caótica y sin rumbo. Otro de los trabajos de la sesión fue BUBOTA, de Carlota Bujosa. El primer trabajo de la mallorquina se adentra en la memoria y la construcción de la identidad, a través de un recorrido heterogéneo y sincero por su archivo familiar, en un viaje a su intimidad y a su familia, redescubriendo unas imágenes que a la vez son cercanas y lejanas, en una manera de recuperar la memoria y su propia identidad de sus dos padres, ahora convertidos en meras figuras, sombras y fantasmas que pululan por esas imágenes y encuentran su sentido en esas ausencias que conviven en el presente de la directora. DE UNA ISLA, de José Luis Guerín. Hace cuatro años La academia de las musas, el anterior trabajo de Guerin, cerró L’Alternativa. Ahora vuelve al certamen con una película bellísima y enigmática en la que hace un recorrido con una imagen cautivadora en 16 mm y en blanco y negro, en el que a través de intertítulos nos va explicando los orígenes y el presente de la isla de Lanzarote, filmando de forma poética y maravillosa toda su naturaleza, en un trabajo sencillo, sincero y magistral, donde Guerin vuelve a deleitarnos con su inmensa capacidad para ver lo oculto y ocultar aquello que no hace falta mostrar.

SWARM SEASON, de Sarah J. Christman. La directora estadounidense regresa al festival con una película de corte ecológico y fascinante en que nos sitúa en Hawaii en las proximidades del volcán Mauna Kea, donde conoceremos a una madre y su hija que cuidan con detalle y mimo a sus abejas, mientras el padre protesta por la construcción de un gran telescopio en la montaña, y más allá, seguimos los experimentos de unos científicos con la idea de viajar a Marte. Todo ese microcosmos, lleno de contradicciones, donde los autóctonos luchan por preservar su modo de vida en consonancia con la naturaleza en pos a ese progreso que antepone el ser humano a la vida y los animales, nos lo cuenta Christman de un modo sencillo, íntimo y existencialista, capturando al detalle toda el esplendor de las abejas y la naturaleza, y todo aquello que parece olvidarse de lo que somos y hacia dónde vamos. DE NUEVO OTRA VEZ, de Romina Paula. La actriz, escritora y directora teatral argentina se funde en un retrato sincero e íntimo, entre el documento y la ficción, en una vuelta a sus orígenes para hablarnos de la feminidad, la maternidad, crecer emocionalmente y la búsqueda de uno mismo, en una película sencilla y honesta donde vuelve al hogar familiar junto a su madre y su hijo pequeño, intentando poner en orden su vida y su tiempo, en una catarsis emocional donde se mezclan las relaciones afectivas de hoy en día, la amistad, las dificultades para encontrar trabajo y sentirse bien contigo mismo, en una cinta que huye de convencionalismos y constantemente se está haciendo preguntas e interpelando a los espectadores, a partir de un tono ligero y tranquilo, acercándose de forma natural a las grandes cuestiones de la existencia, a través de una profunda reflexión sobre la vida y las emociones. EL CUARTO REINO, de Adán Aliaga y Àlex Lora. https://atomic-temporary-59521296.wpcomstaging.com/2019/11/23/el-cuarto-reino-de-adan-aliaga-y-alex-lora/. https://atomic-temporary-59521296.wpcomstaging.com/2019/11/24/entrevista-a-adan-aliaga/

BAIT, de Mark Jenkin. El cineasta británico nos sitúa en Cornualla, un pequeño pueblo de pescadores inglés, donde a partir de la rivalidad de dos hermanos con distinta suerte, nos habla de tiempo, memoria, tensiones y conflictos emocionales, amor, amistad, choque de clases entre aquellos que se niegan al cambio de las cosas, y a los otros, que invaden ese espacio ancestral con su turismo y sus necesidades tan diferentes. Todo contado de forma brutal e íntima con un brutal 16 mm en blanco y negro, cercano al estilo de los primeros filmes de Loach, Leigh o Frears, en el que podamos contar su grano, que casa con naturalidad con esa dureza y violencia física y emocional que recorre toda la película, con ese tono de ilusiones rotas y deseperanza. LE MER DU MILIEU, de Jean-Marc Chapoulie. El artista y director de cine francés, que ha trabajado en la serie Cinéma, de notre temps, nos propone una película innovadora y muy sorprendente, porque rescata todas esas imágenes del circuito cerrado de los hoteles encaradas al mar mediterráneo, a partir de la correspondencia que mantiene con la escritora Nathalie Quintane, destinada a Siria durante la guerra, nos va explicando la memoria y el presente de un mar que simboliza las contradicciones y la miseria de nuestro tiempo, bien complementado con los humorísticos diálogos que mantiene el director junto a su hijo adolescente, en un retrato íntimo y profundo sobre los males de nuestro tiempo a partir de las diferencias entre capitalismo y vida.

Hasta aquí mi camino por L’Alternativa 26, que ha ofrecido una gran programación en esta edición, como suele ser habitual, con un nivel altísimo de gran cine, de ese cine reflexivo, auténtico, sincero, duro, inquieto y sobre todo, cine imperdible y sensible, lleno de retratos de personas de toda condición y lugar, dejando el listón muy alto para la próxima edición, que desde este momento esperamos con expectación, y nos vamos muy contentos por haber vivido la experiencia de esta, porque L’Alternativa sigue más enérgica, más audaz, y provocadora que nunca, manteniéndose firme en sus principios y, caracterizándose como un festival fiel a su idiosincrasia, ofreciendo un cine que gustará más o menos, pero que sigue fiel a su espíritu contestatario, complejo y sumamente radical tanto en su forma como en su contenido. GRACIAS POR TODO A AQUELLOS QUE HAN HECHO POSIBLE L’ALTERNATIVA 26, muchísimas felicidades por el cumpleaños, y nos vemos el año que viene…

Entrevista a Manolo Munguía

Entrevista a Manolo Munguía, director de la película «H0us3». El encuentro tuvo lugar el lunes 16 de septiembre de 2019 en el Soho House en Barcelona.

Quiero expresar mi más sincero agradecimiento a las personas que han hecho posible este encuentro: a Manolo Munguía, por su tiempo, amistad, generosidad y cariño, y a Carmen Jiménez de Begin Again Films, por su tiempo, paciencia, generosidad y trabajo.

Presentación L’ALTERNATIVA 2018

Presentación de L’ALTERNATIVA 25 Festival de Cinema Independent de Barcelona, con la presencia de Cristina Riera y Tess Renaudo (Directoras del Festival) Judit Carrera (Directora CCCB) y Francisco Vargas (Responsable de la Área de Audiovisuales del ICEC) en el CCCB en Barcelona, el miércoles 7 de noviembre de 2018.

Quiero expresar mi más sincero agradecimiento a las personas que han hecho posible este encuentro: a Cristina Riera, Tess Renaudo, Judit Carrera y Francisco Vargas, por su tiempo, sabiduría, generosidad y cariño,  y a Anna Fernández de La Costa Comunicació, por su amabilidad, generosidad, tiempo y cariño.

FIRE!! 23a Mostra Internacional de Cinema Gai i Lesbià 2018

El pasado domingo 17 de junio se cerró el telón del FIRE!! 23 Mostra Internacional de Cinema Gai i Lesbià, en su sede habitual del Instituto Francés en Barcelona. Este año el tema central del festival se ha centrado en la adolescencia, en ese período capital donde, tanto niños como niñas, experimentan su propia intimidad, en el descubrimiento sexual, el rechazo y estigma social, y los conflictos propios de la edad. Las películas que han formado parte de las diferentes secciones, de procedencias diversas y formatos, han incidido en el deber de mostrar a cada uno como se siente, y en trabajar para la aceptación, tanto a nivel personal como a nivel social. Mi primera aventura en el FIRE!! Arrancó con la película MA VIE AVEC JAMES DEAN, de Dominique Choisy. La primera película del director francés es un hermoso y divertido cruce entre el cine de Eric Rohmer y Wes Anderson, en el que Géraud, un joven cineasta independiente presenta su película (que da nombre al título de la película) en lugares costeros donde el cineclub se mantiene gracias a la voluntariedad de algunos románticos. Una cinta donde el amor se presenta como algo que choca con la libertad individual, las ansías de ser uno mismo, en un relato lleno de ironía, donde en que el amor abierto y sincero, se mueve entre contradicciones, pasados revueltos y situaciones rocambolescas, y más propias del cine cómico de antaño. Choisy nos hace pasar un rato agradable, mezclando paisajes bellos, personajes solitarios y amores difíciles, en una película donde se habla de amor libre, de personas que no lo son tanto, más por sus propios miedos, y el rechazo de los suyos.

Continúe con la película 1:54, de Yan England. La cinta se centra en Tim, un adolescente que siente el rechazo y la presión social de su instituto por el hecho de ser diferente. El cineasta canadiense muestra el acoso escolar, la soledad que provoca y la fascinación de las redes sociales como herramienta para provocar dolor en los demás, y lo hace en un relato que muestra crudeza y violencia, pero de un modo sincero y directo, sin caer en la condescendencia  o el discurso fácil, sino en ahondar en las violencias adolescentes y en los conflictos que todo eso provoca en un joven, que encontrará en el deporte un aliciente para combatir tanta crueldad y hostilidad, planteando una historia donde la falta de comunicación deviene en un conflicto de compleja solución. La poderosa interpretación de Antoine Olivier ayuda a convencernos de la amarga situación que viven muchos adolescentes en su cotidianidad en sus institutos. La siguiente película que tuve oportunidad de ver fue LOVE, CECIL, de Lisa Immordino Vreeland. Documento didáctico e interesante sobre Cecil Beaton, uno de los fotógrafos, escritores y pintores más influyentes del siglo XX, que se codeó con artistas de toda índole y la realeza europea. Su controvertida personalidad queda patente a lo largo de su vida, sus aires de dandi, su amor por la belleza y el glamur, y su pasión por la vida y el arte, le llevó a amar a hombres y mujeres, siempre con esa pasión que le caracterizaba. Vreeland, una experta en la biografía, traza una película que recorre la vida de Beaton, desde muchos ángulos, desde la complejidad del personaje, y sin ningún atisbo de endiosamiento, dejando entrever todas sus caras y facetas, desde lo íntimo hasta lo más abierto y social, presentando a un hombre marcado por su infancia, amante de la poesía, de la clase y la extravagancia, que siempre deseó capturar la belleza, aunque sólo durase un suspiro.

Después me acerqué a EVA + CANDELA, de Ruth Caudeli. La ópera prima de la directora española afincada en Colombia, es un retrato sobre el amor, arrancando con la pasión devoradora de los primeros momentos, continuando con la convivencia y los proyectos en común, y finalmente, el desgaste de la relación y el distanciamiento por intereses diferentes. Todo contado desde el mundo del cine, ya que una de ellas es directora, y la otra, actriz, capturando la intimidad del hogar, los sueños comunes y como estos se van resquebrajando con el inevitable paso del tiempo y las diferentes circunstancias a las que tienen que enfrentarse. Caudell nos habla de amor, de pasión, pero también, de la difícil vida en común, de compartir sueños y de los conflictos que se van generando por el cariz diferente que van adquiriendo las respectivas carreras profesionales, en un relato íntimo y natural, en el que destacan la interpretación de su maravilloso dúo protagonista. Después, le tocó el turno a LOS MODERNOS, de Marcela Matta y Mauro Sarser. La primera película que dirigen conjuntamente los cineastas uruguayos, es una película fresca, inteligente y sencilla, en la que con un primoroso blando y negro, nos retratan la vida de tres parejas y sus conflictos sobre la paternidad, la realización personal a través de una profesión artística, y la libertad sexual, creando situaciones divertidas, dramáticas y surrealistas, en una película que crítica con ironía la impostura del arte, sus excesos y miserias, a través de unos personajes íntimos, contradictorios y perdidos, dejando entrever el mundo moderno, donde las relaciones siempre penden de un hilo muy frágil, la vulnerabilidad de las emociones, y la incertidumbre de una sociedad cada vez más superficial, en el que las personas se mueven casi a tientas y con un excesivo temor a los cambios personales y profesionales.

Seguí con la película THEY, de Anahita Ghazvinizadeh. La directora iraní nos sitúa en los suburbios de Chicago para hablarnos de J, adolescente que se encuentra en un tiempo de transición, en el que ha dejado el tratamiento hormonal, para decidir sobre su identidad de género. La realizadora nos habla de un período corto, un fin de semana donde J recibirá la visita de su hermana mayor y el mejor amigo de ésta, en un instante, en el que los tres personajes se encuentran en la tesitura de tomar decisiones, de encaminar una vida hacía un lugar u otro. Una película contada de manera cadente e íntima, como si fuera una leve brisa, donde el tiempo pesa y las situaciones mezclan conflictos emocionales, la incertidumbre profesional, el desarraigo del inmigrante, y demás problemas a los que los personajes saben que tarde o temprano deberán enfrentarse. Mención especial a la interpretación de Rhys Fehrenbacher, que encarna con sutilidad y honestidad los conflictos del adolescente en ese trance de decidir su género. Finalmente, vi la película MARVIN OU LA BELLE ÉDUCATION, de Anne Fontaine. La experimentada cineasta francesa retrata en dos tiempos la vida de Marvin, inspirada en una experiencia real, donde vemos la dura y conflictiva infancia de un adolescente con su familia en su pueblo, y luego, en su juventud, cuando se prepara como actor de teatro. Fontaine, con su estilo naturalista y cercano, huye de cualquier atisbo de panfleto y sentimentalismo, retratando a un chaval solitario y acosado, que encontrará en el teatro una vía de escape y una oportunidad para salir de ese ambiente opresivo, tanto en el instituto como familiar. En la ciudad, con más edad, también, se topará con un ambiente sofisticado, pero también no carente de miseria emocional e hipocresía. Un titulo estupendo y profundo que maneja con soltura e intimidad temas complejos y dolorosos, pero lo hace desde muchos prismas posibles, y dejando libertad a los espectadores, en la que podemos disfrutar de la maravillosa presencia de Isabelle Hupert interpretándose a sí misma. Hasta aquí mi aventura en la 23 edición del FIRE!! un festival interesante, muy concurrido y cercano, que nos acerca un cine que nos habla de primera mano y con honestidad sobre los problemas del colectivo LGTBI, que no sólo afectan a las personas que los sufren en carne viva, sino a toda una sociedad que necesita imperiosamente mirar al otro, sin prejuicios ni convencionalismos, y dejándose llevar por el amor y la educación. LARGA VIDA AL FIRE Y HASTA EL AÑO PRÓXIMO!!!

 

Presentación CRAFT FILM FEST BCN

Presentación del Craft Film Fest Bcn con la presencia de su equipo directivo. El acto tuvo lugar el martes 20 de marzo de 2018 en los Cinemes Girona en Barcelona.

Quiero expresar mi más sincero agradecimiento a las personas que han hecho posible este encuentro: a Vanessa Pérez de Somacarrera (directora del festival) y su equipo, por su tiempo, conocimiento, cariño y generosidad, y a Toni Espinosa de los Cinemes Girona, por su organización, generosidad, paciencia, amabilidad y cariño.